sábado, 14 de julio de 2007

TECNOLOGÍA DE LA CERÁMICA CASTREÑA DE LA ISLA DE TORALLA ( VIGO)


El 3 de Febrero de 1985 publiqué con este mismo título en el diario FARO DE VIGO, un artículo donde se analizaba un aspecto concreto del material que más abunda en las excavaciones arqueológicas realizadas en cualquier castro: la cerámica. Se pretendía con ese breve estudio, sacarle más información a este tipo de piezas arqueológicas, de las cuales en la mayoría de los casos, sólo se habla de ellas en relación a su tipología y/o decoración, para luego sacar unas conclusiones relativas a su cronología o función. Consideró que este material aporta muchas más informaciones que las citadas y creo que una de ellas, es la que reflejo en ese trabajo, que copio literalmente:
"Con motivo de la realización de la tesis de Licenciatura del que suscribe estas líneas sobre el "Estudio de los materiales arqueológicos de la isla de Toralla (Vigo, Pontevedra), leída hace unos años en la Universidad de Santiago de Compostela, y deseando conocer la tecnología del yacimiento objeto de estudio, gracias a la colaboración desinteresada del antiguo conservador del Museo Municipal "Quiñones de León" de Vigo y buen amigo, D. Angel Ilarri Gimeno, se mandó al Instituto Geológico y Minero de España, con sede en Madrid, un fragmento de cerámica indígena con unas características comunes a la mayoría de las piezas estudiadas pertenecientes a este poblado castreño y se efectuaron los siguientes análisis y estudios: análisis por difracción de Rayos X; análisis cualitativos de fluorescencia por Rayos X; y estudio cualitativo petrográfico.
En el análisis por difracción de Rayos X se pudo determinar que los materiales principales que poseía la muestra eran el cuarzo libre y el feldespato potásico; y los minerales secundarios eran plagioclasas, biotita y moscovita y como accesorios o trazas, se detectó caolinita y zincón.
En el análisis cualitativo de fluorescencia por Rayos X, se verificó que los elementos principales de la muestra eran Si, Al y K; los elementos secundarios, Ca, Na, Fe; y como accesorios y trazas Ba, Zr, Rb, Zn, Cu, Mn, Cr, Ti y Br.
Del estudio petrográfico, de la muestra de cerámica se pudieron sacar las siguientes conclusiones: la composición mineral nos viene dada por el cuarzo y la microclima como elementos principales y plagioclasa, moscovita, biotita y cricón, como minerales accesorios. Como observaciones podemos decir que los citados minerales se enuentran englobados en una pasta arcillosa recristalizada, de color rojizo ( óxidos de Fe ) en forma de gramos monominerales. La granulometría de estos fragmentos es variable. Predominan los finos, pero existen algunos de tamaño grueso. Su forma es, en general, muy angulosa e irregular. Predomina netamente el cuarzo. En ocasiones aparece asociado a microclina ( e incluso biotita ), componiendo en el interior del fragmento una textura granuda. Este rasgo, junto a la composición general de los fragmentos que componen la trama de este material cerámico, indica que parcialmente o en su totalidad, se utilizaron materiales derivados (arenas, suelos) de rocas graníticas.
Como resumen de lo expuesto anteriormente podemos concretar lo siguiente:
- El estudio petrográfico indica que una gran parte o la totalidad de los elementos para la fabricación de la cerámica son derivados de rocas graníticas, muy abundantes en el entorno del castro en cuestión.
- El análisis de fluorescencia por Rayos X detecta entre los elementos, trazas de Bromo (Br) lo que puede significar dos cosas: una que las tierras utilizadas para hacer la cerámica han estado en algún momento cubiertas por agua de mar y la otra posibilidad, que la cerámica ya fabricada haya estado en contacto con el mar, o mejor dicho, cubierta durante largo tiempo por el agua marina. Nos inclinamos por la primera posibilidad, pues el fragmento cerámico en cuestión fue recogido en una zona alta del castro, lejana de la costa marítima.
- Por último, por el análisis de difracción de Rayos X podemos decir que al ser detectada caolinita en la muestra (elemento que se descompone a los 550º C), dicha pieza fue cocida a una temperatura inferior a esos 550º C...
Como dato de interés podemos apuntar que este grado de cocción de la cerámica procedente del castro de la isla de Toralla, difiere a otra temperatura de cocción analizada en una cerámica del castro de la isla Norte de las Cies, que sitúa dicha temperatura de cocción a unos 800º-850º C. según se desprende del estudio de los profesores Guitián Rivera y Vázquez Varela (Sobre la tenología de la cerámica castreña: cerámica de las islas Cies. Pontevedra. Revista Gallaecia, 1979, tomo 3/4, pp. 275 y ss.)
Por ello podemos decir que la cerámica castreña de la isla de Toralla fue fabricada en un horno de cocción de condiciones técnicas muy inferiores al utilizado en las islas Cíes, revelándonos posiblemente con ello una cronología más antigua para el material cerámico estudiado procedente del castro de la isla de Toralla."
Nota.- En la imagen podemos ver diferentes fragmentos cerámicos, pertenecientes a asas decoradas del castro de la isla de Toralla, con una cronología que se sitúa hacia los siglo III-II antes de Jesucristo.

2 comentarios:

RUSKA dijo...

Hola, estoy preparando un trabajo en ingles sobre la ceramica en galicia y tu pagina me ha sido util.
Un saludo, Josefa Barreiro

José Manuel Jesús Hidalgo dijo...

Ante nada, perdona el retraso en darte las gracias por tu comentario.
Me alegro de que te ayudara, pues es un tema poco conocido y difícil de encontrar datos sobre él. Un saludo