Hoy, desde aquí, trataremos un tema que aún hoy día no está totalmente resuelto. Me refiero al hallazgo de hachas pulimentadas en los castros. El castro de Vigo, no fue una excepción, y a lo largo de las intervenciones arqueológicas realizadas en el mismo, ha dado diversas hachas de este tipo de diferentes tamaños, material, colores y formas, que pasamos a analizar brevemente a continuación.
La primera referencia de hallazgo de este tipo, ya la tenemos en 1929, con la vista a nuestra ciudad del famoso arqueólogo aleman, Hugo Obermaier, en que se nos dice que entre otros materiales se encontró una pequeña hacha pulimentada. En 1970, se localizó otra que en la actualidad está en el museo "Quiñones de León". Es de fibrolita y mide unos 8,2 centímetros de longitud, 4 centímetros de ancho y posee unos 2 centímetros de grosor medio. Ya en 1982, se localizó otra, de características totalmente diferente: es de ónice veteado con tonos marrones y blancos y sus medidas son: 3,4 centímetros de largo, 0,9 centímetros de grosor medio y su anchura varia de los 2,7 centímetros en su zona afilada y tan sólo 1,3 en su otro extremo. En la campaña siguiente, 1983, hay que citar el hallazgo de un fragmento de otra hacla pulimentada de tonalidad verdosa y tamaño medio. En 1984, se encontraron dos más de sección elíptica y otro elemento pulimentado (tipo jubia) muy fino pero de gran dureza, de sección oval, de 5,5 centímetros de largo, 1,2 centímetros de ancho máximo y tan sólo 0,4 centímetros de grosor. Aquí, también hay que recordar otras hachas localizadas en épocas anteriores a la visita de Obermaier( visita de la Comisión de la Diputación de Pontevedra, con López Cuievillas a la cabeza, en 1928) y otras más cercanas, como las de 1968 y 1982, encontradas por el estudioso de nuestro pasado, P. Díaz, que conocemos por referencias verbales.
La problemática sobre estos hallazgos arqueológicos en los castros es muy grande y diversos autores han aportado soluciones o hipótesis para intentar resolver este dilema. Asi algunos mencionan la posibilidad que estas hachas sean fruto del expolio de megalitos; que corresponden a niveles de ocupación anteriores a la Edad de Hierro; o bien que sean contemporáneas de la cultura castreña. Dentro de la utilización de estas hachas en época castreña, hay que señalar que bien pudieron ser empleadas en funciones meramente prácticas o bien utilizadas con cierto carácter mágico.
Por mi parte, opinar en cuanto a la función de las mismas, que deben de analizarse una por una y por las características de cada una ( material de fabricación, dimensiones, ..), nos hablará de su utilización práctica o mágica en su vida cotidiana. Así, por ejemplo, la hacha de 1970, con unas medidas y grosor determinados pudo ser utilizada para funciones eminentemente prácticas ( como talar árboles, por ejemplo ) y la de 1982, de material y dimensiones totalmente diferentes, podría estar más vinculada a una función más bien mágica o religiosa.
En la imagen, dos útiles localizados en la campaña de 1984: uno corresponde a la tipología tradición de las hachas pulimentadas y el otro, podría considerarse más bien una especie de jubia, bien documentados los dos tipos en épocas anteriores.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario